lunes, 3 de febrero de 2014

Leyenda guaraní de la hierba mate.

Un día, Yasí, la luna, decidió bajar a la Tierra y le pidió a la nube rosada, Arai, que la acompañara. Se convirtieron en hermosas mujeres y comenzaron a pasear por la selva. De pronto, algo se movió detrás de un árbol. Era un jaguar a punto de abalanzarse sobre ellas....

hierba mate

Entonces, de entre las matas salió un indio apuntando al tigre con su arco. Cuando el animal atacó a las mujeres, una flecha salió disparada hacia la fiera y la detuvo en pleno salto. El jaguar cayó muerto, mientras que Yasí y Arai recuperaron instantáneamente su forma en el cielo. 

Como debían su vida al indio, para recompensarlo aparecieron una noche en sus sueños con la misma forma que habían adoptado en la Tierra y le prometieron una planta que serviría para unir a los hombres, para borrar la fatiga y aligerar las penas. Con sus hojas los hombres podrían preparar una infusión para alimentar los músculos y el alma.

Cuando el indio despertó a la mañana siguiente, encontró ante sus ojos un ancho y ondulante mar de una hierba que no conocía: eran los tiernos brotes de la yerba mate o caa-guazú